El aceite de oliva virgen extra crea un jabón muy nutritivo,
mantiene la humedad interior de la piel, no bloque los poros y con el aloe vera
se enriquece el jabón aportando un efecto calmante.
En el sobre engrasado le voy a añadir aceite de oliva muy
artesanal, de una producción para uso familiar por lo tanto creo que es muy
natural, me lo ha traído una amiga de un pueblo de Italia.
Me gusta añadir aroma de vetiver al jabón de aloe porque da
sensación de frescor, aunque como sabéis, el aroma no es importante en estos
jabones porque lo que se busca es que sean buenos para la piel y para el
organismo, que no absorbamos productos extraños por lavarnos.
Tenemos que utilizar muchos productos, unas veces para
curarnos evitando males mayores y otras porque nos los ponen en cualquier cosa
sin que nos demos cuenta. Por lo menos, al lavarnos podemos evitar contaminar nuestro
cuerpo si nos interesamos y
dedicamos un poco de tiempo para
hacer jabones sanos.
RECETA
1.000 gramos de aceite de oliva virgen extra
134 gramos de sosa caustica o Hidróxido de sodio
313 gramos de agua (gramos de sosa por 2,3333)
2 gramos de vitamina E
2 gramos de ácido cítrico
10 gramos de aceite de oliva artesanal
150 gramos de pulpa de aloe vera
20 gotas de aroma de vetiver